LA MISTERIOSA HISTORIA DE AUTOR MISTERIOSO

        

OPCIÓN 1:

GANADORA DE LA SEMANA: Marina Sáez Rivas, 2ºESO

           Era su primer día en el instituto, y esperaba que él no la hubiese seguido también hasta allí. Se trataba de un hombre sin escrúpulos, siempre llevaba la cara tapada con un pañuelo negro. Corría el rumor de que era un señor que se había quedado sin casa y que vivía en una de las cuevas de la montaña mas cercana de la casa de Sara. Sara era una niña de doce años y había visto muchas veces a ese señor, ella pensaba que era casualidad, un día se fue a un centro comercial a Valencia a comprar ropa, y a lo lejos, detras de un periódico, pudo reconocer el pañuelo; la niña estaba aterrorizada. Cuando entró en su nuevo instituto se dio centa de que su profesor de música llevaba puesto el mismo pañuelo que tantas veces había visto. Se propuso seguirlo hasta su casa y se dio cuenta de que vivía en esa cueva, volvió a su casa con miedo a que le hubiera visto y le hiciera algo malo. Al día siguiente volvió al instituto y decidió no contar nada a nadie por lo que pudiera pasar. Pero un día lluvioso Sara volvió andando a su casa, entonces vio que se le acercaba un coche, era él, iba muy despacio, a la velocidad de Sara. Cerca de su casa Sara echó a correr, él también...

OPCIÓN 2:

GANADOR DE LA SEMANA: Diego Ginesta 3º E.S.O

            Era su primer día en el instituto, y esperaba que él no la hubiese seguido también hasta allí porque nunca podría soportar que tambien fuese a hacer daño a sus amigos como lo hizo con sus padres. Intentaba no ponerse a llorar pero sabía que era especial y que podría pasarle a menudo, así que entró en clase preparada para seguir su vida con normalidad hasta que el destino la llamase.
           Estaba asustada, sus padres habían sido raptados y no se sabía su paradero, habían desaparecido en extrañas circunstancias pero ella sabía que había sido él. Ahora la había seguido a ella hasta allí así que tenía que escapar, empezó a andar más rápido y cuando cruzó una esquina y comprobó que no estaba, aparecío delante de ella como un suspiro. -Hola, ¿ibas a algún lado?